La Comisión realiza el Encuentro por la Verdad ‘El Luzón, Putumayo: territorio digno para la vida y la paz’

Orito, ubicado en el departamento del Putumayo es uno de los municipios más afectados por hechos del conflicto, con un total de 35.808 casos victimizantes, según datos registrados ante la UARIV. En relación a las afectaciones causadas por los ataques a la infraestructura petrolera, este municipio alcanza la cifra de 381 atentados, concentrados mayoritariamente en la inspección de San Vicente del Luzón, un sector que no sobrepasa los 5 kilómetros de territorio.

Entre las afectaciones que resalta la comunidad, se encuentran: la quema de 17 tractocamiones; las explosiones entre los sectores de El Yarumo y Samiguel el 31 de diciembre de 2005, durante la mal llamada ‘Operación Chamusquina’; La explosión del oleoducto en más de 150 oportunidades; la quema de dos viviendas consecuencia de las detonaciones provocadas al oleoducto en la vereda Palestina; el daño del acueducto de la I.E.R. Nueva Bengala en la Inspección del Luzón, la contaminación de los ríos Gallo, Sábalo, Luzón y Guamuez tras la explosión del oleoducto, entre muchos otras.

Estos ciclos de violencia son el motivo por el cual la Comisión de la Verdad promueve este Encuentro por la Verdad, esta jornada permitirá reunir a la comunidad para visibilizar sus resistencias, sus luchas y sus estrategias de convivencia para mantener la unidad comunitaria en medio de la violencia y la intención de los actores armados por debilitar el tejido social, durante más de 30 años de conflictos en esta región. También se expondrá la conexión entre la explotación petrolera, las economías ilegales y la ausencia estatal para explicar fenómenos de violencia asociados a la militarización del territorio.

Esta será la oportunidad para sensibilizar sobre la historia reciente del municipio de Orito y en especial a la Inspección de San Vicente del Luzón.  Asimismo, se pretende incluir la estrategia de Diálogo Social en escenarios de conversación común en la región y hacer recomendaciones para la no repetición de los patrones y violencias ligados al conflicto armado interno en el territorio.

Para entender la ruptura que causa el conflicto en los modos de vida de los pobladores basta escuchar los testimonios de algunos habitantes, quienes describen la amenaza que el conflicto ha representado en sus vidas. “Me veo afectado por las voladuras del tubo, porque vivo en las riberas. Como vivimos en un cabildo, hubo muchas plantas medicinales desaparecieron por causa del crudo”. Otra habitante, recuerda que “desde los cinco añitos que yo me acuerdo, comenzaron las explosiones. Cada vez que había una, me dejaba aturdida. Recuerdo una ocasión que explotó tan duro, que pasé una semana sin poder escuchar”.

El encuentro reconocerá la dignidad de las víctimas en tres dimensiones: afectaciones a la infraestructura petrolera y comunitaria; vinculación y utilización de menores y población civil en general en la guerra e imposición de órdenes territoriales violentas a la población. Sin embargo, esta también será la oportunidad que tiene esta comunidad para contarle al mundo las bondades turísticas, biodiversas y culturales de la región para desligarse de la estigmatización que ha dejado la violencia y las economías ilegales al territorio.

La Inspección de San Vicente del Luzón, es un ejemplo de resistencia, y más allá de sus procesos significativos y simbólicos, se destaca la resistencia diaria de las personas que tuvieron que reconstruir sus casas, sitios de trabajo, lugares de cultivo y de riego. Asimismo, tuvieron que anteponerse a los impactos ocasionados a las fuentes hídricas y, con el dolor por la ausencia de sus muertos y desaparecidos, siguen trabajando en la construcción de paz y convivencia desde la diversidad.