Resistencia, el séptimo episodio de ‘La fuerza de mi voz’

“Cuando adquirí mi discapacidad me tocaba depender de alguien que me llevara al baño, que me diera agua, que me bañara, incluso que me acostara. Llegó un tiempo en el que mi mamá tenía que cargarme, pues cuando tuve la fractura tenía que cargarme para todo. Para mí fue muy duro porque me tocaba ver a mi mamá llorar”.

Jessica Pautt nació en Puerto Libertador, Córdoba, y vivió su infancia en Montería. A los 10 años fue víctima de una emboscada por parte de actores armados que disputaban el control de la zona. En el marco de ese hecho una bala se incrustó en una de sus piernas, lo que le causó una artrosis de segundo grado. A lo largo de este capítulo, Jessica habla de los obstáculos que tuvo que superar y de cómo logró dar fuerza a su familia y a sí misma para “ver la vida con otro color”, como ella misma dice.

“Hay una canción que yo iba cantando en el momento justo en que sentí que la bala impactó en mis piernas, se llama ‘Sueño por Colombia’, la canta Nelson Velásquez. Es una canción que jamás en la vida se me olvidará porque habla de cómo la guerra trunca la felicidad de las familias y de cómo los niños crecen sin sus padres y sus madres… A veces me da risa, como que yo digo —tanta canción y justamente yo ir cantando la que me iba a marcar para toda la vida —. Hoy en día, a mis 29 años cumplidos, siento que si yo tengo una discapacidad es por algo, es para demostrar que sí podemos”.

Para Jessica, la palabra ‘discapacidad’ no debería existir, y desde que comenzó a ver sus heridas como una oportunidad para ayudar a otros, empezó su proceso de perdón. Jessica se define como una mujer resiliente que se ríe de sí misma para sanar. Con la risa, dice ella, se puede perdonar hasta a uno mismo.

“Yo no veo la palabra resistencia como fuerza, yo la veo como resiliencia, porque cuando tú comparas la fuerza con la resiliencia, aunque son palabras similares, la resiliencia es la que te permite que te levantes de ese suelo dónde estás. Te levantas con la mejor actitud, te levantas con otros pensamientos, con actitud positiva, con otra perspectiva de vida, tú no vuelves a cometer los mismos errores. La resiliencia es paz, es amor, es bondad, es cariño, es todas las cosas buenas”.

En la música, Jessica encontró un refugio de sanación. Con el canto, narra su historia a través de palabras que le permiten resistir a la indiferencia y al rencor. Con cada letra, Jessica ayuda a sanar a otros y a construir memoria colectiva en torno a la lucha incansable del pueblo colombiano, que, a pesar de todo, no sucumbe a la barbarie.

“Con una capacidad diferente creo que también podemos seguir adelante. Tenemos la misma capacidad de pensamiento y la misma capacidad de actuar, pero de una manera diferente en la movilidad, por eso valoramos más lo que la vida nos brinda. Le canto a todo; le canto a la vida, le canto al amor, le canto a la tristeza, le canto a la esperanza, le canto a la defensa de los derechos. Las letras de las canciones llevan testimonios de vida, frases de lo que en algún momento a alguna persona le pasó o le está sucediendo, siempre he encontrado la música como un refugio”.

Con esta reflexión sobre la resiliencia los invitamos a escuchar a Jessica Pautt. Su voz lleva mensajes de perdón, reconciliación, amor propio y valentía. Síganle la pista en los próximos capítulos de esta producción sonora.