La Comisión recibió tres informes sobre despojo de tierras en Urabá, Magdalena y Bolívar

Estos informes narran historias del campesinado del Eje Bananero, en Urabá; Zona Bananera, en Magdalena; y Montes de María, en Bolívar, en las que el despojo de tierras es una situación que afectó a una gran parte de la población y que permanece y subyace en los proyectos de vida de las comunidades rurales.

Los informes se elaboraron a partir del trabajo que adelanta la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), en el que se evidencia, a partir de las exigencias de justicia y verdad de las personas reclamantes de tierras, que muchas de las situaciones relacionadas con el despojo quieren ser silenciadas y olvidadas. Estos informes harán parte del proceso de escucha plural que lleva a cabo la Comisión y servirán como insumo en el riguroso proceso investigativo que realiza la entidad.

“Existe una limitación de la verdad judicial, limitaciones que vienen por ley, ya que no hay acción penal frente a responsables del despojo. Es necesario complementar la verdad judicial de los procesos de restitución con la verdad que esclarece la Comisión de la Verdad”, advirtió Gustavo Gallón, director del CCJ.

Por su parte, Claudia Marcela Castellanos, investigadora del CCJ, aseguró que el despojo y el desplazamiento ha sido un flagelo constante en estos territorios y que además de esclarecer la verdad de lo ocurrido, es necesario trabajar para evitar la continuidad de estos fenómenos, pues actualmente los campesinos siguen siendo victimizados con estas prácticas: “Evidenciamos que los campesinos dejan de ser propietarios y sufren el retroceso de volver a ser jornaleros en tierras ajenas”.

Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, agradeció el trabajo de la Comisión Colombiana de Juristas, y se comprometió a trabajar y profundizar estas investigaciones para seguir avanzando en el mandato de la Comisión de la Verdad: “Recibimos estos informes para hacerlos parte del patrimonio que la Comisión quiere guardar, para profundizar en ellos, para que las generaciones futuras los conozcan lo que vivimos y especialmente para que esto no continúe y estas cosas no se repitan”.

Posteriormente, los equipos de la CCJ explicaron el proceso de elaboración de los informes y los hallazgos de las investigaciones en estas regiones. Información que será acopiada por los equipos de la Comisión para profundizar, analizar y contrastar estos hallazgos.

Acto seguido, Carlos Martín Beristain, comisionado, explicó la dificultad de los procesos que tienen que ver con tierras y aseguró que estas investigaciones son bases sólidas para que la Comisión avance en el proceso de esclarecimiento: “Los casos de restitución de tierras son muy difíciles, sobre todo para hacer cumplir los fallos. Nosotros acogemos sus informes con el mayor interés, les agradecemos el trabajo y ahora los equipos de la Comisión seguirán trabajando sobre este material que ustedes nos entregan”.

A esta voz se unió la de la comisionada Alejandra Miller: “Nosotros ahora quedamos con preguntas claves que nuestro equipo de investigación buscará resolver. Debemos ser capaces de poder explicarle al país lo que hubo detrás del despojo y el desplazamiento y lo que hace que este conflicto continúe y que la violencia se recicle”.

Al cierre, Paula Villa, directora del área de tierras del CCJ concluyó: “Estos informes nos acercan a una gran conclusión, es que quienes se beneficiaron del despojo de tierras en Colombia siguen pasando inadvertidos. Y esperamos que esto sea un insumo para que la Comisión pueda esclarecer el fenómeno del despojo de tierras, pero también puedan apoyar la formulación de garantías para la no repetición, como lo dicta su mandato”.