Pastor Alape, Carlos Moreno Tuberquia y Jhoverman Sánchez inician su contribución a la verdad y reconocimiento de responsabilidades

En una carta enviada en marzo de este año, Pastor Alape, uno de los máximos líderes de la extinta guerrilla de las FARC-EP, expresó su voluntad de presentarse a la Comisión de la Verdad para contribuir al esclarecimiento de lo ocurrido en el marco del conflicto armado en Colombia y destacó la importancia que tiene para la Comisión escuchar a todos los responsables de esta guerra: “Es bien importante la presencia de quienes fueron combatientes enfrentados durante años”, se leía en la misiva.

A Alape se le unieron Carlos Moreno Tuberquia, antiguo miembro del EPL, las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU) y el Clan del Golfo; y Jhoverman Sánchez, excomandante del frente 58 de las FARC-EP, con influencia en la región del Urabá antioqueño, quienes también expresaron su deseo de entregar su testimonio a la Comisión.

En un acto que contará con la participación de Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, Alape, Tuberquia y Sánchez iniciarán su proceso de contribución a la verdad y reconocimiento de responsabilidades aportando al esclarecimiento de lo ocurrido durante sus años en medio de la guerra en la región de Urabá, una de las más golpeadas por el conflicto y donde la violencia se ha reciclado históricamente.

Este espacio se enmarca dentro de la ruta de contribución a la verdad y reconocimiento de responsabilidades de Rodrigo Londoño y Salvatore Mancuso, anunciada el pasado 18 de marzo. En esta ocasión, enfocada en el nivel regional en el Urabá antioqueño.

Actualmente, la nueva generación de los grupos paramilitares y algunas guerrillas siguen ejerciendo control social, territorial y militar en zonas estratégicas como el norte de Urabá, el Golfo y el Bajo Atrato. Además, las comunidades y pobladores de la región han expresado su preocupación por el recrudecimiento de la violencia y el aumento de asesinatos en ciudades como Apartadó, Turbo y Chigorodó.

A esto se suma que el control por las rentas ilegales, sobre todo el narcotráfico, ha generado enfrentamientos entre diferentes grupos armados como el Clan del Golfo, el ELN y grupos narcotraficantes transnacionales.

Por otra parte, en el proceso de escucha territorial que ha adelantado la Comisión de la Verdad se ha evidenciado que los procesos de restitución de tierras y las exigencias de comunidades negras, campesinas e indígenas se han visto truncadas por la persistencia del conflicto armado en la región y la falta de respuesta institucional.

¿Qué hacer con los reciclajes de la guerra en Urabá? ¿Cómo responde el Estado para proteger los derechos de las comunidades y los pobladores de la región? ¿Cómo plantear estrategias locales para que la desmovilización de las FARC no termine por repetir el proceso de reconfiguración violenta de los territorios como sucedió en la década de 1990? Estas son algunas de las preguntas que la Comisión quiere resolver en este diálogo con los actores principales de esta historia y que pueden ayudarnos a comprender el conflicto armado, profundizar en los factores que desde la legalidad hacen posible que la violencia se recicle y buscar respuestas para frenar la guerra en Colombia.

Esta Contribución a la Verdad se realizará el viernes 23 de julio, de manera virtual a partir de las 10:00 de la mañana. Sígalo a través de comisiondelaverdad.co, el canal de YouTube de la Comisión y facebook.com/comisionverdadc.

Pastor Lisandro Alape Lascarro

Perteneció a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP)​. Desde agosto de 2017 es miembro de la Dirección Nacional del Partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común y delegado al Consejo Nacional de Reincorporación.

En 1979 ingresó al Frente 4° de las FARC-EP en la región del Magdalena Medio. Su ingreso se produjo debido a la violencia política sufrida contra la Unión Nacional de Oposición y particularmente contra los militantes comunistas en esta zona del país.

Tras su ingreso cumplió distintas tareas propias de los guerrilleros rasos y adquiriendo responsabilidades con el paso del tiempo.

En 1984 ingresa a la dirección del Frente 4° y luego al del Frente 24. En 1986 fue recogido por el Secretariado para cumplir funciones de ayudantía y en 1987 fue destacado junto a Timoleón Jiménez y Jorge Briceño para liderar la primera experiencia de coordinación de frentes que daría origen al Bloque Oriental. Durante el cumplimiento de dicha tarea, Pastor ingresó al Estado Mayor Central de las FARC-EP en 1988.

Durante la Octava Conferencia Nacional Guerrillera, celebrada en abril de 1993, Pastor Alape fue nombrado Comandante del Bloque Magdalena Medio, función que desempeñó hasta el año 2012 cuando fue nombrado Coordinador del Bloque Efraín Guzmán y se desplazó hacia el bajo Baudó.

En 2014 Pastor se trasladó a la ciudad de La Habana para vincularse al equipo negociador de las FARC-EP y luego de la firma del Acuerdo de Paz en 2016 se ha desempeñado como dirigente del Consejo Nacional de Reincorporación, labor que ha desarrollado al tiempo que su militancia en la dirección del partido político Comunes.

Carlos Moreno Tuberquia

Perteneció al Ejército Popular de Liberación (EPL), Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU) y Clan del Golfo. Actualmente se encuentra recluido en el búnker de la Fiscalía General de la Nación.

También estuvo en el Bloque Centauros de las Autodefensas, desmovilizándose el día 3 de septiembre de 2005, en Yopal, Casanare. Luego hizo parte de la reorganización de desmovilizados que lideró José Heber Veloza alias ‘HH’, desempeñándose como mando medio dentro de esa organización criminal, pasando posteriormente a delinquir para la organización criminal de Daniel Rendón Herrera alias 'Mario'.

Para los años 2006 - 2007, alias Mario comenzó el rearme de varios desmovilizados para formar las autodenominadas Autodefensas Gaitanistas o Los Urabeños (Clan del Golfo), donde alias Nicolás fue nuevamente vinculado y enviado a una zona bananera en el municipio de Chigorodó.

A partir del año 2008 asumió la comandancia de la subestructura 'Carlos Vásquez', con injerencia en los municipios de Carepa, Chigorodó, Apartadó y Turbo en el Urabá, sus funciones las cumplió como Comandante Financiero a nivel general en esta organización como hombre de confianza de alias Otoniel.

Jhoverman Sánchez

Sánchez fue conocido en la guerra como “Rubén Cano” o “Manteco”, nació en el corregimiento de Currulao (municipio de Turbo) en 1970. En los primeros meses de vida salió desplazado con su familia hacía Puerto Berrio (Antioquia) a causa de la violencia contra los trabajadores bananeros en la zona y por esa razón su lugar de nacimiento aparece registrado en ese municipio del Magdalena Medio; sin embargo, desde su retorno a Currulao en la segunda mitad de la década de 1970, ha vivido la mayor parte de su vida en la región de Urabá.

En 1985, a la edad de 15 años, se vincula por voluntad propia al Quinto Frente de las FARC-EP por invitación del comandante Isaías Trujillo. En ese momento, Jhoverman Sánchez empieza su carrera como guerrillero raso y a partir de 1990 fue ascendiendo rápidamente hasta llegar a ser parte de la dirigencia en el V Frente.

En ese tiempo su accionar estuvo relacionado con labores de patrullaje en la zona bananera y en algunas zonas de Bajo Atrato y el sur de Córdoba. A partir de 1990 empezaron sus labores de mando con algunas unidades conocidas como “escuadras” y “compañías”.

Desde 1998 hasta la firma del Acuerdo de Paz en 2016, fue el comandante del Frente 58 de las FARC-EP que operó principalmente en el norte de Urabá y en los límites con los municipios de Tierralta y Valencia (sur de Córdoba).