¿Por qué perviven las violencias estructurales e históricas contra la población LGBTI?

El pasado 26 de octubre se llevó a cabo la presentación del informe 'Vidas y territorios en disputa: dolor, memoria y lucha de personas LGBTI en las laderas', acerca de víctimas LGBTI del conflicto armado urbano en las comunas de Medellín, el cual fue realizado por la Universidad de California (UCLA) y el colectivo Casa Diversa de la comuna 8 de Medellín.

El informe entregado a la Comisión de la Verdad reúne la historia de ocho víctimas del conflicto armado urbano, pertenecientes a las comunas 1, 5, 8 y 13, quienes han sufrido hechos violentos debido a su identidad de género y orientación sexual. El documento busca dar reconocimiento a las personas LGBTI víctimas del conflicto armado urbano en Medellín a través de sus relatos, vivencias, procesos de duelo y memoria.

Este informe hace parte del proceso de escucha plural que lleva a cabo la Comisión y servirá como insumo en el riguroso proceso investigativo que realiza la entidad.

“Reconocemos el valor de las historias que compartieron ocho personas con nosotras, sobre todo porque sabemos que las historias y los dolores de las personas de la población LGBTI, y de muchas víctimas del conflicto armado, algunas veces han sido instrumentalizadas por las instituciones, la academia y las ONG. Estas acciones terminan profundizando el dolor y revictimizando a la población LGBTI. Agradecemos y nos solidarizamos con las ocho personas que nos abrieron una ventana hacia sus dolores más profundos”, expresó Ammy E. Ritterbusch, investigadora de UCLA.

La investigación revela cómo ningún tipo de violencia está aislada de las demás y da a conocer las diferentes formas de violencias vividas por lesbianas, gais, bisexuales y personas trans en las laderas de Medellín, tales como: violencia sexual; desplazamiento forzado intraurbano; violencia simbólica, física, económica e institucional. Hechos que han sido perpetrados por todos los actores armados y legitimados por la sociedad contra de las personas LGBTI y sus cuerpos. Así lo expresó Jhon Restrepo, director de Casa diversa: “Las violencias estructurales e históricas que vivimos perviven a pesar del esfuerzo gigante de muchos defensores y defensoras de derechos humanos, activistas, académicos, organizaciones, colectivos y juntanzas que durante muchos años hemos venido luchando y resistiendo, en la búsqueda de un futuro posible para todos y todas. Los hechos victimizantes no definen quiénes son las personas de la población LGBTI que hacen parte de este informe”.

El informe permite reconocer no solo lo que le ha pasado a las víctimas LGBTI en Medellín y sus perpetradores, sino también las diferentes maneras de resistencia y transformación del tejido social, para honrar aquella fuerza con el fin de avanzar, sanar y construir memoria por medio de herramientas como el arte, la escritura y el liderazgo.

Alejandra Miller, comisionada de la verdad, aseguró que este ha sido un tema silenciado: “Creo que las mujeres hemos tenido más oportunidad de poner en lo público lo que pasó con nuestros cuerpos y nuestras vidas en el contexto del conflicto armado, pero creo que todavía ha habido mucho silencio alrededor de lo que ha pasado, y todas las agresiones que vivieron y las resistencias de las personas LGBTI. Este tipo de informes nutren de una manera muy potente nuestro proceso de esclarecimiento de la verdad y del informe que vamos a entregar”.

Arena Simbaqueba Gómez, investigadora de la UCLA, concluyó recordando el reto hacia el futuro que tienen tanto la Comisión como las organizaciones sociales frente a las garantías de la no repetición y la transformación de la sociedad en pro de la diversidad: “Se deben abrir espacios valientes para que personas de la población LGBTI sientan que tienen garantías para compartir su historia y para vincularse a procesos de sanación”.

Véa la entrega completa aquí ↓↓