Comunicado de la Comisión de la Verdad al Gobierno Nacional sobre desalojo del espacio que alberga la Casa Museo Comunitario de la Memoria de las Víctimas

La Comisión de la Verdad recibe con profunda preocupación la noticia de la orden de desalojo por parte de la Sociedad de Activos de Estupefacientes (SAE) del Centro de Emprendimiento de San Carlos, en Antioquia, lugar que aloja diversas expresiones sociales y organizativas, entre ellas la del Centro de Acercamiento, Reconciliación y Reparación (CARE) o Casa Museo Comunitario de la Memoria de las Víctimas de San Carlos. El CARE es uno de los 28 sitios que conforman la Red Colombiana de Lugares de Memoria (RCLM), que trabaja por la construcción de memoria y garantías de no repetición.

Como es sabido, este espacio fue un lugar marcado por la violencia. Hay evidencias de que allí fueron asesinadas y torturadas personas por lo que se le conoció como la “casita del terror”. Y fueron las víctimas, especialmente las mujeres de este municipio, las que se propusieron hacer de este un lugar de memoria un espacio para la tramitación del dolor, para hacer pedagogía y trabajar por la paz. Gracias a iniciativas como esta y otras fue que el municipio de San Carlos recibió, en 2011, el Premio Nacional de Paz.

Para la Comisión de la Verdad está claro que la memoria es un eje central de la reparación de las víctimas y de la no repetición, que las víctimas merecen especial atención del Estado y de la sociedad. Por eso exhortamos a la SAE a suspender la orden de desalojo. A las entidades del Ministerio Público, al Gobierno Nacional, a la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, al Centro Nacional de Memoria Histórica, a la Defensoría del Pueblo, a la Oficina del Alto Comisionado de Paz, a los gobiernos Departamental y Municipal, a encontrar salidas para preservar y fortalecer este espacio para el municipio de San Carlos como un ejemplo para el país de lo que significa el deber de memoria del Estado.

Expresamos nuestra solidaridad con las víctimas y con la población de San Carlos y nuestro reconocimiento por la labor realizada y de la que tenemos mucho por aprender en el camino hacia la paz.