Las víctimas, como nadie más, tienen la voz y la fuerza moral para lograr la reconciliación de Colombia
En el marco del Día de las Víctimas, el presidente de la Comisión reitera la deuda que tiene el Estado con las víctimas, cuyo estatus es reconocido internacionalmente y a quienes les vulneraron sus derechos “hasta lo más hondo de su dignidad humana”.
Se estima que Colombia tiene más de nueve millones de víctimas del conflicto armado interno, y aunque dignificarlas, en un país en el que la violencia aún no cesa, debe ser una tarea de todos los días, la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición se une a la conmemoración, este 9 de abril, del ‘Día nacional de la memoria y solidaridad con las víctimas’.
La Comisión, desde el inicio de su mandato, tiene claro que el centro del relato colectivo que construye para reconciliar al país y elaborar el informe final son precisamente quienes padecieron o padecen la guerra. Es por eso que de las 24.129 personas cuyos relatos han sido escuchados por la Comisión desde noviembre de 2018 hasta la fecha, 22.446 son víctimas; es decir, el 93% de los testimonios son de quienes fueron afectados y afectadas directamente por el conflicto armado.
Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, expresó que en este proceso de escucha no quisiera dejar a ninguna víctima por fuera. “Nos sentimos profundamente unidos con todos quienes han sufrido los rigores de este conflicto armado interno de Colombia que dejó tanto dolor”, dijo.
En el marco de la conmemoración, De Roux recordó que las víctimas siempre están presentes para la Comisión y eso se refleja en los miles de testimonios personales que ha recibido la entidad, en los que dan cuenta del sufrimiento por el que pasaron, viviendo situaciones como los falsos positivos y otros hechos que fragmentaron familias, ocasionaron desplazamientos y masacres, dejaron afectados por las minas antipersona, entre otras realidades que se han repetido durante más de cinco décadas.
“Quisiéramos decirles de corazón que estamos completamente con ustedes, que su dolor es nuestro dolor y su verdad es la nuestra. La verdad también la hemos encontrado en centenares de documentos de entregas colectivas que ustedes nos han dado, por lo cual sentimos un agradecimiento profundo y un compromiso sin límites cuando tenemos que presentar al país la verdad a partir del drama y la tragedia que ustedes han sufrido”, agregó De Roux.
El presidente de la Comisión reiteró la deuda que tiene el Estado con las víctimas, cuyo estatus es reconocido internacionalmente y a quienes les vulneraron sus derechos “hasta lo más hondo de su dignidad humana”. Pueblos indígenas y afro, mujeres, comunidad LGTBI, niños, niñas y adolescentes y diversos sectores de la población colombiana han sido victimizados por la violencia.
“Nadie como ustedes tiene la capacidad de hablar ante Colombia con una extraordinaria fuerza moral y política, desde la realidad de haber perdido a sus seres queridos, desde la destrucción de sus hogares, desde la forma como les arrebataron sus tierras, desde los años pasados en el secuestro. Los invitamos a tomar en sus manos ese poder enorme ético, que está solamente en sus voces, sus cuerpos y miradas, para hablarle a Colombia con toda la fuerza. Eso los dignificará como nadie, como nada”; expresó De Roux.
La Comisión de la Verdad, en el último año de su mandato, conmemora a las víctimas, para que nunca más los menores de edad sean llevados a la guerra, para que cese el asesinato de líderes sociales y el hostigamiento a los pueblos étnicos, para que las mujeres y la comunidad LGBTI no sufran más abusos, para que podamos vivir en un país en paz.
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