“Es imposible hacer arte en el paraíso”: Miguel Ángel Rojas

Este jueves 25 de febrero a las 6:00 p.m., a través de Facebook.com/comisionverdadc, comisiondelaverdad.co y nuestro canal de YouTube, se estrena una nueva charla de ‘Nombrar lo innombrable: conversaciones sobre arte y verdad’, un espacio en el que los artistas colombianos hablan sobre cómo el arte ayuda a nombrar el conflicto de maneras particulares, convirtiéndose muchas veces en un testimonio y en un mecanismo de resistencia. En esta ocasión, la comisionada Lucía González hablará con el artista Miguel Ángel Rojas.

Rojas nació en Bogotá en 1946. Su obra, que abarca fotografía, pintura, dibujo, instalaciones, video y uso de materiales no convencionales, trata asuntos relacionados con la sexualidad, la cultura marginal, la violencia y la problemática relacionada con el narcotráfico: con el consumo y la producción de drogas.

Es particularmente conocido por su trabajo con la hoja de coca, con billetes de dólar, con fluidos corporales; también por su pieza David, en la que un soldado sin pierna posa como el David de Miguel Ángel, y por las fotografías que tomó clandestinamente, a lo largo de los años setenta, en el Faenza y otros teatros de cine en donde ocurrían encuentros homosexuales clandestinos, precisamente en un momento en que la sociedad en su conjunto rechazaba las identidades sexuales diversas.

Rojas realizó estudios de pintura en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Nacional

de Colombia y de Arquitectura en la Universidad Javeriana. Ha expuesto individual y colectivamente desde 1972 en Colombia, Venezuela, Australia, Puerto Rico, Cuba, Estados

Unidos, Japón, Brasil, Inglaterra y México.

El curador José Ignacio Roca explica el lugar que tiene Rojas en el mundo del arte colombiano en el texto introductorio del catálogo de la exposición Objetivo Subjetivo de la siguiente manera: “Ocupa un lugar paradójico en el arte colombiano, pues a pesar de ser considerado por la crítica y los artistas mismos como un referente incuestionable, se ha mantenido al margen del reconocimiento público y en gran medida también del mercado, lo que le ha permitido una gran independencia creativa”.

Por su parte, Rojas se ha mostrado comprometido con las causas humanas y ha procurado usar su arte para visibilizar la violencia y las injusticias que ha vivido Colombia a lo largo de su historia. “El artista en general debe tener un compromiso hacia la justicia y la humanidad. Somos entes sensibles y esa sensibilidad tiene que ir más allá de hacer cosas bonitas”, dijo en una entrevista del Centro Nacional de Memoria Histórica.