“La inteligencia es una necesidad para el estado”: coronel (r) Jaime Ariza

El pasado jueves la Comisión de la Verdad realizó un simposio sobre el papel de la inteligencia del Estado en el marco del conflicto armado. La conversación contó con la moderación del comisionado Carlos Ospina y contó con la participación como panelistas del coronel (r) Jaime Ariza Girón, oficial de la reserva activa del Ejército Nacional y especialista en inteligencia militar, profesional en relaciones internacionales y estudios políticos en ciencias militares y miembro de la Academia Colombiana de Historia Militar; y de John Marulanda, coronel de la reserva activa del Ejército Nacional, especialista en inteligencia militar, operaciones psicológicas y profesional en ciencias militares.

El simposio contó con la asistencia virtual de cerca de 300 personas entre funcionarios de la Comisión, docentes y estudiantes de la Universidad Sergio Arboleda y miembros de la reserva activa del Ejército Nacional.

El espacio inicio con la introducción sobre la historia de la inteligencia militar en Colombia y el mundo, y con una explicación sobre la inteligencia estratégica internacional y cómo esta ha venido actuando en el marco del conflicto colombiano.

Para el coronel Jaime Ariza, los servicios de inteligencia surgen para identificar información estratégica, para señalar los fenómenos de impacto negativo o las amenazas formales que tiene un Estado contra el bienestar de los ciudadanos. “Así lo reconoció Bolívar cuando logro adelantarse y derrotar a las tropas españolas, también estuvo presente para los líderes militares en el año 1970 ante la amenaza de insurgentes y ante la aparición de nuevos fenómenos con los que la sociedad colombiana no estaba de acuerdo, por ejemplo, el secuestro, el asesinato selectivo y la agresión permanente por parte de los grupos alzados en armas, esto hizo que la inteligencia se diversificara de su intención y estudio de las amenazas formales que tiene un Estado”, expresó Ariza.

Asimismo, destacó que, para él, la inteligencia es una pieza fundamental para proteger al Estado, propendiendo por el bien de la comunidad y la soberanía territorial, “La inteligencia es una necesidad para el Estado, no se le puede negar la oportunidad de defenderse, así como el cuerpo humano lo hace con los glóbulos rojos. La inteligencia no es lo que han pretendido satanizar, por el contrario, es el primer escalón de defensa de la nación y a disposición de la sociedad”.

Por su parte, el coronel John Marulanda abordó la inteligencia externa como el agregado militar que recoge información y rinde informes para beneficiar los intereses de la nación en la política global. “La inteligencia externa puede verse de dos maneras, la inteligencia abierta que hace referencia a segregarías militares, embajadas, misiones militares y al implante de agencias de inteligencia, pero también existe la inteligencia interna discreta, que son básicamente agentes e informantes que operan en el país, muchas veces con el desconocimiento del país anfitrión, aunque en otros casos son aceptados por el país receptor, como el caso de la DEA en Colombia.  Lo más importante es entender que los países que vienen aquí de manera abierta o discreta a cumplir esas tareas buscan defender sus intereses, quien diga que viene aquí de otra nación a ayudar al interés de Colombia está mintiendo, puede que exista conjunción de intereses, pero esa es otra cosa­­”, acotó Marulanda.

Luego de las exposiciones se dio espacio para las preguntas de los asistentes. Una las primeras fue “¿Cuál es el rol de la inteligencia en una guerra irregular?”, ante este cuestionamiento Jaime Ariza respondió que “la inteligencia es la herramienta de uso científico y metódico que trabaja en vincular la información relacionada a los blancos militares, para la toma de decisiones correctas, que permitan contrarrestar la agresión”.

Otra de las preguntas fue “¿Cómo debería tratar la legislación colombiana a los agentes de inteligencia extranjeros que se han identificado en el país?”, a esta pregunta respondió Ariza diciendo que “lo primero son los aspectos funcionales de seguridad, se realiza un proceso de aprensión a los agentes externos, son reseñados e investigados para conocer sus intenciones, por último, se expulsan del territorio, con el ánimo de desmantelar la estructura criminal con la que se encuentren vinculados, pero también tienen implicaciones de tipo diplomático y políticas” puntualizó.

Como cierre al espacio, el comisionado Carlos Guillermo Ospina se comprometió a dar respuesta a las preguntas que quedaron plasmadas durante todo el espacio e invitó a toda la sociedad en general a participar en los espacios virtuales que la Comisión está liderando con el objetivo de dar continuidad a su mandato en medio de la crisis sanitaria que vive el país.