Abrir panel
Comisión de la Verdad

La paz en la Amazonía empieza por el reconocimiento y la garantía de derechos

Esta semana se conmemora el Día Internacional de los Bosques Tropicales, la Comisión de la Verdad resalta la importancia de garantizar la protección de estos ecosistemas y la pervivencia física y cultural de los pueblos indígenas que los resguardan.

LA COMISIÓN | June 26 de 2020

La paz en la Amazonía empieza por el reconocimiento y la garantía de derechos

“El ser creador nos dejó a cada pueblo un territorio, un lenguaje, su forma de alimentación y su sistema de gobierno, educación, justicia propia, el manejo del medio ambiente, eso él nos lo dejó a todos los pueblos. Llegó un momento en que todo ese sistema de gobierno propio que acabé de decir lo manejaba correctamente el indígena para tener su pervivencia. Llegó un momento cuando todo cambió, entonces por eso la resistencia de nosotros es […] la planta sagrada con lo que podíamos nosotros comunicarnos entre hombre/naturaleza y la divinidad”, entrevista sujeto colectivo comunidades: Consejo de Ancianos, Bora, Puerto Limón y Centro Arica. Asociación Indígena de la Zona Arica (AIZA) – Amazonas.

 

 

En la Amazonía colombiana, durante el primer trimestre de 2019, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) registró 57,55% de detecciones tempranas de deforestación, mientras que el sistema GLAD de la Universidad de Maryland y la Fundación para la Conservación y Desarrollo Sostenible (FCDS) señaló que en ese mismo periodo fueron taladas 75.031 hectáreas de bosque primario. La vulnerabilidad de estos ecosistemas pone en riesgo la pervivencia de pueblos indígenas y de las comunidades campesinas, que además se ven afectadas por el accionar de los grupos armados y el conflicto armado interno. En el Día Internacional del Bosque Tropical recordamos la urgencia de frenar la deforestación de la selva y la violencia armada, que amenazan la vida y cultura de los pueblos indígenas.

Reconociendo la problemática de la destrucción de pueblos y ecosistemas, la Corte Suprema de Justicia, en 2018, declaró a la Amazonía colombiana como entidad sujeta de derechos. Un territorio que comprende el 44,3% del territorio nacional y responde político y administrativamente a seis departamentos: Amazonas, Guaviare, Guainía, Vaupés, Caquetá y Putumayo. La Amazonía colombiana hace parte, según la Fundación Gaia, del bioma amazónico, que comprende el bosque tropical continuo más extenso e importante del mundo, con una extensión de 778 millones de hectáreas distribuidas en nueve países sudamericanos.

Los ecosistemas que componen esta región se asientan en un suelo frágil y a través de largos procesos evolutivos allí se ha consolidado una vegetación y formas de vida únicas que ayudan a regular la temperatura planetaria. Esto hace que su conservación sea uno de los objetivos principales de los esfuerzos que hacen frente al cambio climático. Pero esta es una región susceptible a las intervenciones humanas y está siendo destruida por actividades como la cacería, tala de bosques, pesca indiscriminada, minería ilegal, praderización y quemas de bosques para la ganadería extensiva, siembra de monocultivos y prácticas de guerra. Estas actividades no solo ponen en riesgo la biodiversidad del mundo, además amenazan la pervivencia física y cultural de sus habitantes.

 

dia bosques amazonas auxiliar

 

La región amazónica es conocida como la ‘Gran Maloca de Colombia’, un territorio ancestral y sagrado para 64 Pueblos Indígenas de los 115 existentes en el país. En este territorio se registra la existencia de dos pueblos en aislamiento voluntario o estado natural y se tienen indicios de la existencia de 15 pueblos más en esta condición. La región también es habitada por población no indígena que llegó atraída por las diferentes bonanzas económicas y por el continuo desplazamiento forzado que ha generado el conflicto armado interno a lo largo de la historia y que aún persiste.

“Ustedes son muy afortunados, tienen tierra donde sembrar, ríos dónde pescar, en cambio de dónde vengo yo, ya no tenemos ríos limpios donde pescar, yo vengo de la comunidad de Manacaro, una comunidad que queda por allá, en el río Caquetá en donde los pescaditos al igual que nosotros están contaminados con mercurio, es lo único que nos deja la minería a nosotros. En el 2014 nos sacaron muestra de cabello y resultó que yo tenía como 20,1 por ciento de mercurio y todos los que vivimos allá estamos contaminados. A nosotros el conflicto no nos mató con las armas, ni derramamos la sangre, nos mató en vida, todos los días morimos en silencio, nuestros ojos lloran todas las noches porque arden, nuestros pulmones duelen, nos hormiguea el cuerpo, nos cansamos rápido, muchas veces uno siente que la muerte está llegando, pero no, es vivir agonizando y eso que hay más gente que tiene en su cuerpo más mercurio que yo”, lideresa E. Faerito, del Pueblo Indígena Murui, Comunidad de Mocagua, 2018, Memorias de Vida y Muerte - ONIC y CNMH.

El Día Internacional de los Bosques Tropicales, la Comisión de la Verdad hace un llamado urgente a comprender la relación entre selva, territorio y pueblos indígenas, que los constituye como una unidad, sin separación y donde están profundamente conectados, de formas que aún están por descubrirse. Las afectaciones y atentados violentos contra cada árbol, cada hectárea, cada río, son un atentado contra la vida de las comunidades, asimismo, el asesinato de un líder o la violación sexual de una de sus mujeres o niñas es un atentado contra los pueblos, el territorio y la vida.

Esclarecer la verdad del conflicto armado e implementar las recomendaciones para la no repetición son el camino hacia la paz. Para ello se debe saldar la deuda histórica que han dejado las diferentes bonanzas y sus oleadas de violencia; la incidencia de actores armados legales e ilegales; y el trato diferenciado por parte del Estado que, según los habitantes de la Amazonía, está fundamentado en prácticas de exclusión y discriminación hacia los pueblos indígenas y sus territorios. El reconocimiento y la garantía del goce efectivo de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales (DESCA) de los habitantes de la Amazonía es necesario, pero para que esto sea una realidad se necesita del esfuerzo de toda la sociedad colombiana y de la comunidad internacional.

Comentar:

Artículos destacados

© 2022 Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición

Desarrollado por Pixelpro