Autores
-
Relatos del porvenir: reconocer los árboles, los caminos y pobladores como sujetos de dolor.
-
-
Desde el litoral, caminando por los territorios en la búsqueda de la verdad del conflicto.
-
Una Maleta colombiana, la experiencia del exilio colombiano y la Comisión de la Verdad.
-
Los Diálogos para la No Repetición son espacios de participación y discusión social.
-
-
-
En borrador: intuiciones, experiencias, llanto, canciones, reflexiones, certezas y todo aquello que sea parte de esta transición histórica.
La política de la escucha
“No se olvide comisionado. La clave de todo está en esos derechos económicos y sociales”.
Hace unas semanas cuando María dio a luz una bebé hermosa, la felicité por la nueva vida y le dije que tendríamos que pensar cómo explicarle el mundo a estas alturas. Estos días, Colombia anda incendiada. El segundo país más desigual de América Latina tiene enormes desafíos que siempre parecieron distintos, pero se han ido haciendo siameses. A finales de 2019, las movilizaciones inicialmente convocadas por los sindicatos y que abrazaron a tanta gente indignada, tenían no solo protesta sino propuesta. Y unieron dos cosas que casi siempre han estado separadas, la reivindicación del cumplimiento del Acuerdo de Paz y las demandas económicas y sociales de estudiantes, pensionistas y sindicatos. Después vino la pandemia, que nos dejó a todos encerrados. Y más luego, aislados de los demás y con el dolor y pérdidas que se acumulan, y con menos trabajo y más pobreza.
Las propuestas de hacer una reforma tributaria, que gravaría aún más a las empobrecidas clases medias y a los pobres que sobreviven con la mitad de la canasta básica, volvieron ahora a llenar las calles. Del exilio recibimos muchas letras conmovidas por las historias de movilizaciones y de golpes, de disparos y de discursos que incendian. Lo que pasa, deja a la gente con más miedo y menos ánimo. Cali es el epicentro del terremoto social, que tiene réplicas en los lugares más insospechados. Los terremotos sociales son como un cóctel en los que se juntan cosas explosivas. No son parte de un plan orquestado, ni de una capacidad organizativa que nadie tiene. En los momentos de crisis se necesitan bomberos. El abandono de las montañas prende la llama cuando la naturaleza se quema. El abandono social es esa retama que hace que una chispa se contagie más que el virus caprichoso y letal.
La pandemia ha confinado no solo a la gente sino al malestar, por eso dejó de notarse. A pesar de la paciencia de la buena gente colombiana, hay puntos de fractura donde la elasticidad social no da para más. Si hay algo que caracteriza a la política, es el discurso. Los grandes discursos, las palabras dardo, los discursos monotema. Todos tenemos en la memoria algunos de ellos. Pero creo que no guardamos en la memoria una experiencia de escucha. Cuando tanta gente en tantos sitios de tantas maneras sale a caminar, en un contexto tan difícil, algo quiere decir. Aunque esa no sea la noticia. Los ruidos de las imágenes de robos o disparos, no dejan escuchar el murmullo de la historia. Como en el bolero de Ravel, la música se repite y crece, y crece, y crece, y hay que saber escucharla.
Los derechos civiles y políticos fueron separados de los económicos, sociales y culturales en las discusiones en Naciones Unidas en 1966. El mundo tiene declaraciones y pactos separados. Uno habla del derecho a la vida, la libertad, la asociación, la expresión y todos los que tienen que ver con el ejercicio de la ciudadanía. El otro pacto, firmado de forma separada el mismo día, es el de los derechos que hacen de la vida lo que es, la educación, la salud, el trabajo, la cultura. Los derechos escindidos se juntan estos días en las marchas de la gente, en sus reivindicaciones, y se separan aún más en las balas que cobran vidas.
Tras un largo testimonio en el que recorrimos sus 11 exilios, un viejo lúcido que había sido presidente de la Unión Patriótica, cuando mataron a Bernardo Jaramillo y nadie quería ser el siguiente, al final la entrevista cuando había hablado de asesinatos, desplazamientos, exilios, detenciones arbitrarias, todo lo que tenía que ver con el primer Pacto, me dijo algo de quien no saca rencor de esas experiencias, sino lecciones de vida: “No se olvide comisionado. La clave de todo está en esos derechos económicos y sociales”.
Sobre el blog...
Este blog recoge experiencias del exilio colombiano, y de todos sus nombres, refugio, asilo, víctimas en el exterior, desplazamiento transfronterizo. Todo ello habla del trabajo de la Comisión de la Verdad, en esa Colombia fuera de Colombia. Ese otro país, inexistente en este otro dentro de las fronteras.
Las víctimas que tuvieron que huir. Los defensores de derechos humanos perseguidos. Los secuestrados que se fueron después de ser liberados. Los militantes políticos que huyeron detrás de las balas. Las mujeres campesinas que salieron con sus familias. Los líderes cuya vida corría peligro. Las amenazas para la vida que unen tantas diferencias de periodos históricos, responsables y afectados, incluyendo familias y comunidades.
De todas esas víctimas, sobrevivientes, historias y escuchas de las que somos testigos, habla este blog. Y ojalá dialogue con quienes lo lean.
Carlos Martín Beristain
-
Temas Relacionados:
Comentar:
Otros artículos de este autor
Artículos destacados
-
ENCUENTROLa Comisión de la Verdad reunió a empresarios y empresarias de distintas edades, regiones y sectores económicos para que intercambiaran perspectivas sobre los cambios necesarios para un futuro en paz.
-
ENCUENTROA lo largo de su mandato, la Comisión de la Verdad ha promovido acciones para el reconocimiento de todas las víctimas y la construcción de un relato amplio, en el que estas participen, con miras a que estos hechos no se repitan.
-
CULTURAParedes de veredas, calles y avenidas de estos territorios, fueron intervenidos por víctimas del conflicto, campesinado, juventudes y responsables, para simbolizar sus reflexiones sobre cómo el conflicto armado ha impactado sus vidas y territorios.