Autores
-
Relatos del porvenir: reconocer los árboles, los caminos y pobladores como sujetos de dolor.
-
-
Desde el litoral, caminando por los territorios en la búsqueda de la verdad del conflicto.
-
Una Maleta colombiana, la experiencia del exilio colombiano y la Comisión de la Verdad.
-
Los Diálogos para la No Repetición son espacios de participación y discusión social.
-
-
-
En borrador: intuiciones, experiencias, llanto, canciones, reflexiones, certezas y todo aquello que sea parte de esta transición histórica.
Marcando ocupado
“Las nuevas complejidades hacen que muchos refugiados sigan encontrando el teléfono de quienes tienen que responder a sus llamadas de asilo, ocupado”.
Cuando había teléfonos fijos en las casas, una estirpe de aparatos en vías de extinción, si no querías que te llamaran o que una llamada inoportuna te despertara del sueño, podías descolgar, y el teléfono daba “ocupado”. ¿Cuánto tiempo habla esta gente? No hay manera de que respondan.
Cuando empezaron a llegar refugiados colombianos a muchos países, las organizaciones que trabajan sobre esa problemática, se sentían muchas veces desbordadas. No solo por la cantidad de casos, sino por la complejidad de las historias. Ahí ya no era solo persecución política del Estado, también de guerrillas y paramilitares, y esas formas de crimen organizado que lindan con todo. Como me dijeron mis amigos cuando fui a Colombia la primera vez: “¡Cómo vas allá si eso no hay quien lo entienda!”. Inventamos el dicho que Colombia es un conflicto complejo, no confuso, y que hay que pasar de la confusión a la complejidad. Con una diversidad enorme de casos y situaciones, la complejidad aumenta y la capacidad de evaluar disminuye.
No teníamos hace años conocimiento ni aliados en Colombia, que nos permitieran entender mejor la dinámica de la guerra y los efectos que se manifestaban aquí.
Todavía hoy, instituciones de Costa Rica, Canadá o España preguntan qué pasa en Colombia, porque sigue llegando gente por miedo o persecución. En muchos casos, las demandas de refugio son rechazadas porque no son creídas, porque en Colombia hay un proceso de paz con las Farc. En el imaginario de lejos, la paz es una cosa de un día para otro. Además, aún falta el ELN y las disidencias de las Farc, así como una desmilitarización de otros grupos paramilitares y sectores que siguen ejerciendo violencia, para que la paz sea completa. Las nuevas complejidades hacen que muchos refugiados sigan encontrando el teléfono de quienes tienen que responder a sus llamadas de asilo, ocupado.
Sobre el blog...
Este blog recoge experiencias del exilio colombiano, y de todos sus nombres, refugio, asilo, víctimas en el exterior, desplazamiento transfronterizo. Todo ello habla del trabajo de la Comisión de la Verdad, en esa Colombia fuera de Colombia. Ese otro país, inexistente en este otro dentro de las fronteras.
Las víctimas que tuvieron que huir. Los defensores de derechos humanos perseguidos. Los secuestrados que se fueron después de ser liberados. Los militantes políticos que huyeron detrás de las balas. Las mujeres campesinas que salieron con sus familias. Los líderes cuya vida corría peligro. Las amenazas para la vida que unen tantas diferencias de periodos históricos, responsables y afectados, incluyendo familias y comunidades.
De todas esas víctimas, sobrevivientes, historias y escuchas de las que somos testigos, habla este blog. Y ojalá dialogue con quienes lo lean.
Carlos Martín Beristain
-
Temas Relacionados:
Comentar:
Otros artículos de este autor
Artículos destacados
-
ENCUENTROLa Comisión de la Verdad reunió a empresarios y empresarias de distintas edades, regiones y sectores económicos para que intercambiaran perspectivas sobre los cambios necesarios para un futuro en paz.
-
ENCUENTROA lo largo de su mandato, la Comisión de la Verdad ha promovido acciones para el reconocimiento de todas las víctimas y la construcción de un relato amplio, en el que estas participen, con miras a que estos hechos no se repitan.
-
CULTURAParedes de veredas, calles y avenidas de estos territorios, fueron intervenidos por víctimas del conflicto, campesinado, juventudes y responsables, para simbolizar sus reflexiones sobre cómo el conflicto armado ha impactado sus vidas y territorios.